Celebración. Maxi Abad (centro) con Victor Aiola (intendente de Chacabuco), Erica Revilla (compañera de fórmula), Alejandra Lordén (vice de la UCR nacional) y Gastón Manes.
Ganadores y perdedores. Toda elección, ya se interna o general, traza una grieta entre aquellos que celebran al final de la noche y los que saborean la derrota, amarga. Esos primeros minutos, la lectura del resultado se hace en caliente, es maniquea, binaria. Pero con las horas, el día después, las interpretaciones florecen.
Es el caso de la Unión Cívica Radical, que el pasado domingo celebró internas en Provincia de Buenos Aires, considerada como “la madre de todas las batallas” dentro del radicalismo, en la que el diputado provincial Maximiliano Abad derrotó por un margen ajustado al intendente de San Isidro Gustavo Posse; y también votación de delegados en Ciudad, donde Martín Lousteau ganó casi en todas las comunas con comodidad.
