Nirich, fue entre otras cosas: abogado, escritor, exconcejal de Venado Tuerto, exdocente, exdirigente de diversas instituciones, pero sobre todas las cosas un empecinado luchador por el bien común.
Su currículum es demasiado extenso para poder plasmarlo en una nota periodística. Nació en Rosario el 4 de junio de 1945, pero pasó parte de su infancia en Melincué. Posteriormente volvió a Rosario para cursar sus estudios secundarios y universitarios.
Desde 1980 se instaló en Venado Tuerto, ciudad que hizo suya para siempre, acá tuvo sus tres hijas.
Su compromiso con la profesión que ejercía lo llevó a ser desde 1980 a 1982 presidente del Colegio de Abogados de Rosario y también en los últimos años fue delegado ante la Junta de Gobierno de la Federación Argentina de Colegio de Abogados. A la vez integró el Cuerpo Colegiado de Evaluación Técnica del Consejo de la Magistratura de Santa Fe.
Fue un luchador para la vuelta de la democracia y en 1983 fue elegido presidente del Comité Venado Tuerto de la Unión Cívica Radical. Posteriormente fue concejal, cargo al que renunció rápidamente por desavenencias con el gobierno de Ernesto De Mattia. De todos modos continuó militando dentro de la política hasta que en 1998 atrapado en diversas desiluciones decidió retirarse de dicha actividad.
Sin embargo su propensión a trabajar por el bien común lo llevó a ser docente secundario y terciario e integró diversas comisiones (entre otras cosas fue consejero de la Cooperativa de Obras Sanitarias).
Además fue un apasionado lector y escritor, colaboró con diversos artículos en distintos medios de comunicación (colaboró en Venado 24) y se animó a escribir dos libros muy disímiles. Así en el 2007 publicó Turbulencias, un libro de poesías, y en el 2010, “El salto institucional” un ensayo enmarcado dentro de la tradición del análisis político publicado por la editorial porteña Cuatro Vientos. Actualmente se encontraba escribiendo su primera que quedó trunca con su partida.
Pablo, fue un apasionado de la literatura, la cultura en general, la política nacional e internacional y sobre todo un gran polemista que le gustaba compartir acalorados debates en estrados importantes como en peñas de amigos o mesas de café.
En definitiva una gran pérdida. UN GRAN HOMBRE!!