¡ Aunque tu experiencia particular pueda hacerte creer lo contrario, si Tomás y conducís tenéis altas posibilidades de sufrir un siniestro vial, poniendo en riesgo tu vida y la de otros.

El alcohol es un depresor del sistema nervioso central y afecta las funciones inhibidoras del cerebro, las intelectuales, las sensoriales y las motoras

Falsa sensación de seguridad, con errores de juicio e interpretación que predispone a excesos de velocidad y a violaciones de las normas de tránsito.

La visión se ve afectada. Empeora la visión periférica y se hace más lenta la adaptación a los cambios de luz.

Se alargan los tiempos de reacción, por lo que las respuestas y maniobras se hacen más lentas y torpes.